Los coches cuentan con diferentes filtros, cada uno de los cuales tienen una función específica. En nuestros talleres realizamos la revisión de su vehículo, sustituyendo únicamente aquellos que realmente son necesarios. Entre los filtros más habituales podemos destacar:
-Filtro de aceite.
Este filtro retiene las impurezas producidas por la combustión y el desgaste de las piezas del motor. Cuando el nivel de estás partículas es muy elevado se hace necesaria la sustitución del mismo.
-Filtro de aire.
Retiene las partículas del aire sin limitar mucho el flujo al motor, ya que empobrece las prestaciones y aumenta el consumo. La vida del filtro de aire depende considerablemente del ambiente en que nos movamos.
-Filtro de combustible. El combustible que repostamos puede traer muchas impurezas, las cuales pueden afectar al sistema de inyección de su motor diésel o gasolina. Los antiguos motores a carburador no son tan sensibles a estas impurezas.